La innovación en los proyectos de Acción Social ha de ser liderada por empresas privadas con responsabilidad social y esponsorizada por las administraciones. Es a través del CapEx de la inversión en investigación, el desarrollo tecnológico y la protección de la propiedad intelectual como se logran traducir los avances en una prosperidad sostenida para todos los agentes en la cadena de valor, y consecuentemente, en el destinatario, objetivo último de nuestra misión común.
Nuestra solución integral aúna tecnología, procesos y consultoría con un enfoque de «llave en mano» que proporciona un beneficio operativo inmediato a los ejecutores de proyectos, un acceso más equitativo a diversas licitaciones, e insufla un cambio tranquilo hacia una mayor competitividad, fomentando la creación y sostenimiento del círculo virtuoso de la innovación. De este enfoque se benefician las Administraciones públicas, las empresas privadas con proyectos de Responsabilidad Social, las Asociaciones que ejecutan los proyectos, y también los Proveedores de dichas asociaciones.
Los últimos avances tecnológicos ahora permiten implantar y operar servicios de alto valor añadido en infraestructuras distribuidas que maximizan la productividad, la eficacia y la eficiencia, al tiempo que minimizan los riesgos operativos, financieros y jurídicos. La deflación tecnológica se traduce en una mayor flexibilidad de las estructuras de costes y los modelos de negocio. Esta maleabilidad permite prevenir y amortiguar eventuales variaciones en los presupuestos asignados a los proyectos.
Con un enfoque de producto que engloba tecnología y procesos, se consigue una estandarización a nivel de infraestructura técnica y lógica, minimizando así los costes operativos y de implantación. Esta homogeneidad permite alcanzar economías de escala incluso en un entorno de entidades sociales muy heterogéneas entre sí, aportando valor en la intermediación con proveedores, y democratizando el acceso de las entidades a proyectos mayoritariamente OpEx.
La Unión Europea está fomentando un claro rumbo hacia el Open Source, el Tratamiento de Datos y la Seguridad Informática. Por la especial consideración que merecen los datos de los destinatarios en los proyectos de Acción Social, asumimos dichas directrices como pilares fundamentales de nuestra solución.
Adicionalmente avanzamos en nuestro roadmap de innovación donde, entre otros elementos, consideramos el uso de tecnologías móviles para proponer nuevas soluciones que añadan ubicuidad, inmediatez y veracidad a las diversas interacciones que se producen rutinariamente en el transcurso de un proyecto. Así como los marcos regulatorios son dinámicos e incorporan mejoras y avances sociales, la infraestructura tecnológica y de procesos ha de ser ágil y flexible para seguir cristalizando en el presente las soluciones del futuro.
La Unión Europea establece las directrices principales que son posteriormente traspuestas al ordenamiento jurídico propio de cada país. Por tanto, las líneas maestras de cada legislación nacional en proyectos de Acción Social tienen muchos elementos comunes que permiten la adaptación de nuestras soluciones sin tener que realizar transformaciones estructurales.
Nuestro enfoque de negocio ofrece una oportunidad singular de mejorar sustancialmente la Acción Social en Europa por el potencial de expansión y el ciclo de retroalimentación y mejora a través de la provisión de servicios en diferentes países.